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domingo, 30 de enero de 2011

Introducción a "el duelo"

*Tenía 17 y lo escribí en el funeral de mi abuelito

Nacemos, "vivimos" y morimos, el mismo ciclo nos aplica por igual ó por lo menos es lo único comprobado. Como un iceberg: vemos la superficie sin profundizar.

Y entonces pasa...poco a poco el cuerpo se congela, las funciones cesan, la música nostálgica nos acompaña, y el fin del soundtrack de nuestra vida concluye. ¿Venderá miles de copias? No lo sabemos… pero está en los nuestros hacer publicidad al respecto.

El mundo no se detiene, las lágrimas caen como lluvia torrencial, las taquicardias no se hacen esperar, dejamos nuestra piel de humanos y pasamos a una más "cómoda" la piel de zombie, mínimo hasta la dicha "resignación", y la pregunta del millón es: ¿Por qué?, y un portal se abre en busca de respuestas que nos hagan liberarnos de la ansiedad e impotencia que nos consume.

Entonces SHAKESPEARE aparece en nuestras vidas: ¿Ser ó no ser?

Ser libre de nuestros propios demonios, ser fuerte para aceptar los hechos, ser inteligente al no querer modificarlos, volver a ser un ser humano que se deje sentir... ó vivir tras paredes llamadas "negación", dejarse llevar por la corriente y vivir en calidad de bulto esclavizándote a ti mismo.

¿QUÉ QUIERES SER? ¿QUÉ QUIERES HACER?... Esa es tú decisión a fin de cuentas.

Pero recuerda que la vida termina en un suspiro y que no puedes dejar el dilema en pausa, porque todo pasa y tienes TODO en tus manos para ser feliz, al fin y al cabo a eso hemos sido llamados. Cierra los ojos para poder ver.

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