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domingo, 24 de abril de 2011

Galatea

También me acuerdo de la noche estirada por el humo que salía de tus dedos,
tu mascabado cuerpo disolviéndose en el tiempo.

En idiomas te recuerdo. Un bloffing maestro.

Tengo la espalda ataladrada de hubieras. Tengo desavenencias ficticias
por haber agujereado a nuestros hijos, la casa, el auto y al perro.


Tengo gruñidos intermitentes por las confesiones que redacté en la comisura de tus labios y que mientras dormíamos decidiste borrar girando girando y girándote.

sábado, 9 de abril de 2011

El grito


Muerde su labio inferior, imaginando lo innombrable. Sus ojos permanecen cerrados y los aprieta con tal fuerza, que pareciera que desea hacerlos estallar. La espalda recta, la sangre circula a la perfección...sin tráfico. Extiende sus brazos, para emprender el vuelo sin retorno.

“¡Estreméceme!”, es la petición de todo ese cuerpo suspendido en la habitación. Llaman a la puerta, olvidan el letrero: “Silencio. Obra en proceso”. El canto de las sirenas la seduce y conduce. Endorfinas inducidas por la droga del escapismo espiritual, la libertad le besa el cuello lentamente, la piel se le cae en pedazos para ver nacer el cosmos que comienza con sus labios.

Ella se hace el amor todas las noches, mientras los gatos se pasean y los deseos se aferran a las mentes perversas.

Ella se hace el amor todas las noches,mientras un anciano tiene un paro respiratorio y alguien exclama: "felicidades, es niña".

Ella se hace el amor todos los días, cuando tú caminas, lloras ó suspiras.

Ella existe para ella, como la Luna para la noche y el Sol para el día.

Ella viaja para poseer las almas de los eróticos que como ella...aman la vida.

viernes, 1 de abril de 2011

Una mala lectura


No sé que vió en mí, mientras tomaba un vicio de $50 del refrigerador en una tienda comercial, mi vecino me pidió que le ayudara en unas fotografías (me sentí aliviada, por que en ese momento me pareció más insano que yo). Regresé a casa, con ojeras expuestas en tercer grado, mallas y mi chamarra de cuero (¡oh bendita protectora de mujeres vulnerables!). Me introduje a mi cueva. Nadé durante toda la noche en la alfombra azul, sumergida en placebos, teniendo premuniciones, discusiones, convulsiones. 3 am la hora donde los perros ladran, la hora donde me dejo llevar por el mito de que ellos pueden verte, la hora donde te recuerdo sin remordimientos con pausas cursis y ahogamientos "Alicia en el país de las maravillas". ¡Pero ese no era el punto! aunque...a esta hora tiendo a los pensamientos circulares.

"El mundo no es salvaje, la salvaje eres tú" pensé al mirar mi párpado derrotado por una noche esquizofrénica. Contemplé la belleza del dolor en mi rostro. De la pasión a la obsesión hay una línea delgada...y estoy del otro lado...y también de ese otro.

Me hago responsable de todos mis actos -en un tono de culpa- y en un canto de libertad, en una evasión y por consecuente en mitomanía que a su vez se convierte en "la herencia familiar".

Paso uno: admitir que tienes un problema. Hecho