.

.

sábado, 22 de octubre de 2011

De monstruos y miedos


El monstruo insaciable incendió mi casa hoy por la noche.
Él -a quien amo- me prestó un poco de agua -que más tarde le repuse sin que se diera cuenta-,
el color rojo de mi cabello se coló por los ojos del monstruo, lo sé por que lo miraba a lo lejos desde la casita del árbol mientras groseramente le escupía fuego a él, le advertí que corriera mientras podía pero no me escuchó -creo que se llama amor-.
Tras una batalla agotadora él decidió marcharse, el monstruo dormir y yo despertar.
No voy a mentirles quiero matarlo ahora que se encuentra dormido pero creo que sería suicidio...




No hay comentarios:

Publicar un comentario