Utopías criminales

Cuando no estás cerca de mí, escribo por dos.

Expectativas: Es por que me sientes tan fuerte como yo a ti, y me piensas y me necesitas, y y y...

Volvió... "ese no sé qué, que qué se yo" y ésta vez está insistiéndome con violencia

(Ya no tengo nada -con todo el poder de ésa palabra- que perder)

Todo mi ser te está llamando de nuevo.

Grita:

mi abdomen,

mis piernas,

mi piel,

mi nariz,

mis ojos,

mi boca -ten piedad sufre de ansiedad-,

mi mente,

mi corazón,

mi espíritu...

Y yo:TE RECLAMO, TE RECLAMO, ¡TE RECLAMO! (tres veces)

Provoquemos casualidades y accidentes.
No más espera, no más titubeo, ni miedo, ni moral, ni represiones.

¿Pues qué hemos hecho tan mal?¿Mirar?¿Desear?¿Suponer?¿Imaginar?¿Sentir?

Absurdo que, no tuviesemos nuestros trajes de humanos para justificarnos.

Absurdo que, nos inventemos nuevos nombres a los miedos.

Absurdo que, aun mis labios te sigan esperando.

Querido tú

Solo contéstame algo...
¿Vas a mirarme a los ojos cuando conversemos?
¿Vas a conectarte conmigo al besarnos?
¿Vas a preferir tomar mi alma, en vez de mi mano?
¿Cuidarás y respetarás mi fragilidad?
¿Tocarás cada centímetro de mi cuerpo como si se tratara de seda?
¿Recorreremos el mundo en el silencio?

Ahora yo te contesto...

Voy a usar de pretexto tus ojos para mirar tu alma,
Voy a ser el canal donde nuestros sistemas puedan explorarse desinhibidamente,
Voy a regenerar el concepto de tu alma,
Voy a ser contigo un ser fragil el cual podamos someter a experimentos de aprendizaje,
Voy a tocarte con las intenciones de un coleccionista,
Voy a llamarme silencio para que nunca dejes de recorrer mis universos.

Mientras te espero

Mis piernas no dejaban de moverse, como si tuvieran vida propia

¿Inquietud eh?

me preguntó mi reflejo en el espejo,

"Para nada"

-le respondí en un tono altanero.

Procedí a encender un cigarro -espera, yo no fumo-.

Corrigo entonces.

Procedí a encender mi alma con estimultantes que llevan tu nombre.
Incendié:
mi mente,
mi espíritu,
el firmamento
y nos incendié a ambos en un flashback nocturno, latente y divino.
Encendí mi ventilador
una y otra vez,
para darme cuenta de que
el aire que me falta
es por ti.

Lo sabía

Yo lo sabía desde que te ví....
Terminaríamos en esa calle, en esa banca, bajo ese árbol que formaba un corazón con sus ramas
(perdón, no te dije por miedo a malinterpretaciones)

Nos sentamos, nos miramos y ¿Por qué no?... nos amamos.

Querías jugar un juego popular llamado "crimen y castigo" pero faltaban pistas

¿Existían suficientes?
Intentaba encontrarlas en tus ojos...ahí donde podía vernos a ambos.
En algún punto de la noche busqué las cámaras,

por qué pareciamos la escena final de una -¡buena!- película:

- "¿Dime qué fue lo malo?"

-"Nada..." -respondí-

Y luego el silencio suspiró.

Bipolaridad de ocasión

Dame una señal de vida mi amor... que me muero, me muero.

Grita mi nombre y usa al viento cual eficaz paloma mensajera,

Úsame para librarte de tus enemigos,
Repárteme en tu bolsillo izquiero y derecho, para que yo sea lo que busques,

Pensándolo bien...

No. No me digas nada,
Calla hasta tu alma,
Árrastrame al acantilado y déjame ahí...en lo mas alto.
Donde quede inmóvil, llena de pánico.
Donde no exista lugar para recordar... lo mucho que te extraño.

Interpretando a Edward Hopper

Está ella y su silencio.

En un intento por fragmentar la ciudad y llevarsela en una caja de rompecabezas.
Está él y su silencio.

En un intento por hacer la mejor composición y recordarla en una cápsula de agua.
Están ambos y no paran de hablar,

en una serie de "actos reflejo" medidos con la anatomía de sus cuerpos.

La voz de ellas

Antes de que alguien vuelva a matarme, tengo algunas cosas que decir:

No quiero ser la mirada a la lejanía, quiero ser un "¡Hola! ¿cómo estás?"

No quiero ser "bonita, especial, divertida", quiero ser la roca que avientes a mi ventana a las 2 de la mañana, para despertarme por un beso.

No quiero ser un "te ví la otra vez", quiero que improvisemos y vayamos a un café si nos topamos por ahí.

No quiero ser una palabra, quiero ser una acción.

Y no sé si es mucho pedir (pienso que no) y ésta misma conclusión hace que mi corazón se parta en dos, cuando a "ese alguien" le resulta imposible hacerlo.

Pero tranquila, siempre hay otros "alguienes" que mantienen el universo a flote.

Hoy los ovaciono de pie y cierro los ojos y miro alrededor esperando que algo mágico suceda...

Tu nombre es KARMA

Era increíble ese ser.

A pesar de todo, algo más me atraía. Pero no era él. Era ése conocimiento, lo que me fascinaba.

Como si estar a su lado fuese una fuente inagotable de aprendizaje

( Y yo, estoy sedienta las 24 horas del día).

Lo admito, estoy mirándote.

Ésta vez, con ojos diferentes: más frescos, más nuevos pero no menos expertos.

Perdí la cuenta, de la cantidad de veces que mi corazón te llamó a escondidas.

Perdí tu rastro, pero no tu rostro.

Me perdí y... ¿Te perdí?. Yo dije "adiós" y tu dices ¿"hola"? ¿ó como es ése truco?

Y te quemaste todo:cuerpo, mente y espíritu, todo...menos el corazón.

¿Libre de...?

Tomé aquel libro y lo hice mío.

Lo abracé tan fuertemente -como si en el acto, me fusionara con él-

¿Realmente estaba sola? ¿Ó era mi deseo tan real de creer en ello?
No lo sé y para ser sincera, no me interesa.


Ilusiones: Todo el tiempo, en todo momento. A penas comenzaba a entenderlo.


Aquella sombra proyectada en mi pared (un escenario de ficción para algún culpable),

una mariposa blanca posando más cerca de lo normal (el espíritu de un ser querido),

ése viento juguetón que hace bailar mi cortina (¿una invitación atrevida?).

Libre de:

vivir,

de lastimar -ó dejarme lastimar-,
de jugar a ser un maestro,

de jugar a ser yo.

Libre de:

ser y de hacer...

Pero lo más importante:

"Libre de creer".





Inspirado en "Ilusiones" de Richard Bach